La legionella es una bacteria que puede causar una enfermedad grave llamada legionelosis. La prevención y el control de la legionella en comunidades de vecinos es clave para garantizar la salud y la seguridad de los residentes. En Bolboreta Plagas, realizamos el más completo y efectivo servicio de control de legionella en Barcelona.
Actuamos con las medidas necesarias para prevenir la proliferación de legionella en los sistemas de agua. Asimismo, recordamos las normativas vigentes y la importancia de contar con un plan de gestión del riesgo. La aplicación de estas prácticas nos permite evitar brotes y proteger la salud comunitaria.
¿Cuándo es obligatorio el control de legionella?
El control de legionella en Barcelona se hace obligatorio en aquellas instalaciones que pueden favorecer la proliferación de esta bacteria. Hablamos, por ejemplo, de los sistemas de agua caliente sanitaria, las torres de refrigeración, los condensadores evaporativos y otros sistemas que generan aerosoles.
El Real Decreto 865/2003 establece que estas instalaciones deben ser revisadas periódicamente para prevenir la proliferación de la legionella en comunidades de vecinos. Además, es obligatorio realizar análisis microbiológicos en el agua con regularidad y llevar un registro detallado de todas las operaciones de mantenimiento y limpieza.
¿Cómo se mata la bacteria legionella?
En todos los casos, es muy importante acabar con la bacteria legionella para proteger la salud pública. Además, así se previenen brotes y se garantiza un entorno más seguro. Los siguientes pasos son los que se suelen llevar a cabo para acabar con este problema.
Inspección y diagnóstico del sistema de agua
El primer paso implica llevar a cabo una revisión de todas las instalaciones de agua (torres de enfriamiento, sistemas de calefacción, grifos, etc.). Para ello, empleamos equipos especializados para detectar zonas de estancamiento en las que la bacteria puede proliferar.
Las pruebas de calidad del agua son fundamentales para identificar la presencia de la legionella en comunidades de vecinos. Al analizar los resultados, se determina la extensión de la contaminación y las medidas que deben ponerse en práctica.
Aplicar un tratamiento térmico
El tratamiento térmico que se lleva a cabo consiste en elevar la temperatura del agua a un nivel que sea letal para la bacteria. Por lo general, se recomienda mantener el agua a una temperatura de al menos 60 grados centígrados durante un periodo de tiempo determinado. Este aumento de temperatura destruye la legionella, impide su crecimiento y devuelve la salubridad al agua.
El tratamiento térmico es, por tanto, una medida clave para la prevención de los brotes de legionella en comunidades de vecinos.
Utilizar biocidas específicos
Los biocidas son compuestos químicos diseñados para destruir microorganismos con la legionella. Estos biocidas se aplican de manera regular y en las concentraciones adecuadas que fija la normativa vigente.
Un tratamiento que resulta muy importante para prevenir los brotes de legionelosis. Una correcta aplicación de estos productos garantiza un ambiente mucho más seguro y saludable en la comunidad.
Implementar un programa de mantenimiento y monitoreo regular del sistema de agua
Por último, el programa de mantenimiento y monitoreo incluye inspecciones periódicas y la limpieza de depósitos, tuberías y sistemas de climatización. Asimismo, hay que monitorear la temperatura del agua, ya que la legionella crece en rangos que van de los 20 a los 50 grados centígrados.
Por otro lado, se deben realizar pruebas de calidad del agua con regularidad para detectar la presencia de la bacteria y tomar las medidas de corrección oportunas.
En Bolboreta Plagas nos encargamos de acabar con la legionella en comunidades de vecinos. Ponte en contacto con nosotros para que podamos realizar los trabajos de prevención más adecuados. Te garantizamos la limpieza más profunda y el mejor servicio de control para los residentes.
